El papa Benedicto XVI abogó este miércoles para que el juego del fútbol sirva como ejemplo de honestidad y fraternidad, especialmente para los jóvenes.
Joseph Ratzinger expresó ese deseo durante el saludo a los seis mil fieles que hoy acudieron a la sala Pablo VI del Vaticano, donde el Pontífice celebró la audiencia general de los miércoles, entre los que se encontraban los miembros de la Real Maestranza de Sevilla, dirigidos por el cardenal Carlos Amigo.
"Pueda el juego del fútbol ser siempre vehículo de educación de los valores de la honestidad, la solidaridad y la fraternidad, especialmente entre las jóvenes generaciones", declaró en su saludo a los peregrinos de lengua italiana, entre los que había un equipo de la serie D de la liga italiana.
Ratzinger dedicó previamente una larga catequesis a la vida de San Agustín y anunció que su figura será motivo de sus próximas elecciones en la audiencia.
El Papa invitó a sus seguidores a "imitar la confianza en Dios de San Agustín" y a acogerse "a su intercesión".
"San Agustín ha dejado una impronta muy fuerte en la cultura Occidental y en el mundo", dijo Ratzinger, antes de asegurar que sus "Confesiones" representan un modelo único para la literatura occidental, incluida la moderna".
Recordó que, en un principio, San Agustín "no se sentía llamado a la vía pastoral", sino que pensaba que debía estar sólo al servicio de la verdad, pero destacó que después "comprendió que la llamada de Dios era la de ser pastor para llevar la verdad a los otros".
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